La formación online como fuente de nuevas posibilidades
En el mercado competitivo en el que nos movemos, cada vez es más importante ofrecer un valor añadido para nuestros clientes que nos diferencie de nuestros competidores de cara a la oferta de productos y/o servicios. Así mismo, ser competitivos en nuestras operaciones y en las capacidades de nuestros empleados (o de nosotros mismos), es fundamental para la sostenibilidad de la empresa.
En este contexto, la formación on-line se está abriendo un hueco importante.
Por un lado, el valor adicional buscado podría ser la formación a nuestros clientes. Cualquier producto que tengamos, cualquier servicio que proveemos, dispone de una formación de bajo coste para la empresa, pero alto valor para el cliente. De esta forma, podríamos tener en Internet el manual de uso de nuestro producto de mecánica, o el procedimiento para solicitar una cita, etc. Cursos cortos, pedagógicos, y que ofrecen un valor diferencial, y que serviría para romper barreras entre nuestros futuros clientes y nuestro servicio/producto.
Por otro lado, tenemos la necesidad de formar a nuestros empleados en las actividades de su desarrollo profesional y personal, inversión que repercutirá en la eficiencia y sostenibilidad de la empresa.
En este caso, en España, es de lectura obligatoria la orden TAS/2307/2007 del 27 de Julio, por la que se desarrolla parcialmente el Real Decreto 395/2007 en el que se regula la Formación Profesional para el Empleo, estableciendo el marco legal para la gestión de la formación directamente desde las empresas, que tendrán derecho a bonificaciones en las cotizaciones sociales de manera automática, sin gestión intermedia de ninguna Administración del Estado Incluye además la posibilidad de que las empresas pequeñas (entre 1 y 5 trabajadores) reciban subvenciones especiales.
Las ventajas que obtenemos con la formación online son varias e importantes, como pueden ser:
• Adaptabilidad a la disponibilidad del empleado y sus horarios, y más aún si realiza viajes frecuentes.
• La formación se puede individualizar, e incluso personalizar según el nivel requerido.
• Bajo coste en relación con la formación presencial, ya que es posible reutilizar recursos.
• Existen cursos genéricos disponibles para su compra, como por ejemplo cursos de herramientas ofimáticas tipo Excel, PowerPoint, etc.
• Un mercado maduro, con plataformas muy utilizadas y con amplia aceptación. Se dispone incluso de plataformas de software libre como Moodle, cumpliendo con el estandar SCORM.
• El mayor valor de la formación online se obtiene si se dispone de tutorización, de forma que las dudas y consultas de los alumnos puedan ser contestadas y solucionadas..
No debemos olvidar, sin embargo, que la formación online no es un sustituto de cualquier formación presencial, sino un complemento a la misma.
La formación online es, por tanto, una oportunidad para la empresa, tanto desde el punto de vista de la comercialización, como desde el punto de vista de las personas que trabajan en la misma, pudiendo incluirlas en las ayudas específicas de financiación para la formación.