
Entrevistamos a David Fernández, CEO de LEKTU
LEKTU es el mayor portal en español de libros, ecómics, audiolibros, podcasts, música y vídeo sin DRM. Se trata de un ambicioso proyecto de negocio basado en contenidos digitales en el que además de que cualquiera puede ofrecer sus productos de este tipo por un precio, se pueden ofrecer de forma gratuita o mediante sistemas de pago de recompensa como el pago social, por difundir en redes o por seguir a su autor en redes por ejemplo.
Entrevistamos al CEO de LEKTU, David Fernández.
Cuéntanos qué es LEKTU y cuál es su catálogo actual
Lektu es una plataforma de venta directa de contenido digital nacida en el año 2014, donde autores y editores pueden vender sus obras (ebooks, audiolibros, podcast, vídeo, música) directamente al cliente final. Mediante un sencillo proceso de alta se puede poner un producto a la venta (o descarga mediante uno de nuestros variados métodos de pago) en solo unos minutos.
Actualmente tenemos 5.000 obras en catálogo, de las cuáles el 80% son ebooks. Tenemos títulos de todo tipo, terror, misterio, narrativa contemporánea, tanto de autores autopublicados como de grandes sellos, como por ejemplo B de Books.
Como sabrás a la audiencia de Loogic le gustan las cifras, especialmente las de inversiones, ¿nos puedes contar cuánta inversión tiene LEKTU y cuáles son los planes en este sentido?
La inversión hasta el día de hoy ha sido de 250.000 euros, que nos han servido para crear un producto 100% funcional y probado, que da servicio real a casi 500 autores y más de 45.000 usuarios registrados. Seguimos trabajando en la ampliación de funcionalidades para dotar a la plataforma de aún más opciones que sean del interés de los creadores.
En este tiempo hemos conseguido 100.000 descargas, la mayoría de material gratuito. Con la intención de desarrollar el producto y salir al extranjero a más velocidad estamos buscando incorporar un socio, preferentemente del sector de los contenidos digitales (libros, ebooks, videojuegos, distribuidoras), que tenga además experiencia internacional.
Lektu como proyecto cultural además de un negocio, ¿tiene una estrategia de marketing diferente a cualquier otra startup o esa parte cultural no importa cuando hablamos de marketing?
Tenemos la suerte de tener unos fundadores arriesgados que no tienen un objetivo de rentabilidad a corto plazo. Esto te permite crear estrategias de comunicación más sencillas con las que ahorras bastante. No es el hecho de que se trate de cultura en sí, sino de que la manera en que hemos decidido dar a conocer el producto se basa más en hacer bien las cosas e ir recogiendo los frutos que en campañas para darnos a conocer.
Por ejemplo, quizá sólo el 25% de los autores y editoriales han sido contactados directamente por nosotros para solicitar su alta. El resto han sido ellos los que nos han escrito interesados en lo que hacemos. Así mismo, los usuarios registrados los obtenemos con la participación de los creadores que alojamos, siendo ellos los que comunican que sus productos están en nuestra plataforma.
Piensa, también, que el tipo de productos que vendemos tienen un precio medio muy bajo, 4 euros, con un margen del 25%, lo cual hace difícil rentabilizar una inversión de este tipo.
¿Se puede hacer negocio en España con los productos que ofrecéis en Lektu o es necesario salir fuera?
En España es complicado. Hay que tener en cuenta que somos un país pequeño donde el gasto en lectura no es demasiado grande. Y si hablamos de cultura digital, menos. América Latina y Brasil, de donde tenemos hasta un 35% de visitantes, tienen por desgracia un nivel económico inferior al español.
Por tanto es necesario salir fuera, al mercado anglosajón. Ese es nuestro próximo hito, conseguir para finales de este año la internacionalización de Lektu. No solo se trata de traducir el interfaz público y de administración, sino también de usar las monedas locales para cada país (en este momento sólo usamos el euro) y poder ofrecer catálogo en el idioma del cliente. Nuestro plan pasa por abrir en inglés en diciembre para el mercado británico y estadounidense, y poco a poco ir extendiendo. También adaptar la venta en América Latina a la moneda local de cada lugar.
De esta manera creemos que seremos capaces de multiplicar nuestro catálogo, ventas y usuarios registrados, muchas veces, siguiendo las mismas tácticas que nos han funcionado en España.
Una de vuestras señas de identidad es distribuir contenidos sin DRM, para algunos eso es ir en contra del autor, ¿cómo explicáis a los autores que es lo mejor para ellos y lo más justo para el cliente?
El autor que trabaja con nosotros suele ser de los que tienen todo esto totalmente asimilado. A los que nos ha tocado convencer no nos ha costado demasiado, sinceramente. Nos gusta mucho hacer pedagogía anti-DRM, eso sí, porque es uno de los motivos principales por los que nació Lektu.
La manera más sencilla de convencer a un autor es contarle que en realidad el DRM nunca protege sus obras, ya que es muy sencillamente “saltable” y con unos mínimos conocimientos la obra deja de estar protegida. Es una tecnología defectuosa.
Lo segundo, que no hace sino añadir un coste innecesario a los productos, poner el candado no es gratis.
Y, quizá lo peor, es que no es justo con el cliente porque no tiene una posesión efectiva de lo que ha comprado. Si la tienda donde adquirió el producto desaparece y, por ejemplo, necesita volver a descargarlo en otro dispositivo, podría serle imposible y perder el bien comprado.
Los productos con DRM hacen que el disfrute de los mismos sea una labor complicada y que al final sea más sencillo bajarse un ebook pirata que comprarlo en una librería. Internet está lleno de quejas de personas que intentaron comprar algo de manera legal pero que luego fueron incapaces de llegar a usarlo por culpa del DRM.
Trata bien a los clientes, pónselo fácil, ajusta los precios y haz productos de buena calidad, eso es lo que les decimos a los autores. De los piratas no te preocupes… ¡no te dan dinero!
PS: Las negritas son mías.